Hoy la cuestión de los trabajadores en Colombia vive afectada por la informalidad, la tercerización y el movimiento sindical patronal; sumado a esto la inflación y el costo de vida superan a los aumentos anuales del salario mÃnimo mensual vigente (SMMV) $781.242 para el año de 2018 con un pronostico de gastos de $1`500.000 por parte de una familia al mes, sin poder incluir gastos en recreación y vestuario; Es decir que un hogar donde trabajen dos adultos no alcanzarÃan a cubrir la cifra estimada por cuestiones del descuento sobre la seguridad social ($100.000 x Persona Min).
Es muy común hoy por las calles de las principales ciudades de Colombia ver millones de personas dedicadas al arte del "rebusque" conocida como la informalidad laborar, representando el 65% de los 22 millones de trabajadores en Colombia, esta tipo de trabajo no cuenta con ninguna vinculación de seguridad social ( Pensión, CesantÃas, Salud y Riesgos laborales), sumado a la nula posibilidad de sostener un salario estable mes a mes, es decir que 6 de cada 10 trabajadores y sus respectivos núcleos familiares no van a poder tener una estabilidad económica que les permita mantener un nivel de vida digno sostenible.
La otra gran parte de los trabajadores hoy sufre la principal practica neoliberal llamada tercerización laboral que consiste en la desvinculación laboral por parte de las empresas, lo que las exime de todo vinculo y relación social con el mismo; haciéndose cargo una central de trabajo o temporales la cual es una compañÃa encargada de contratar personal a termino indefinido casi siempre a 10 meses (Febrero a Noviembre) de distintas áreas profesionales o no profesionales y ubicarlos en distintas empresas de forma móvil; esta actividad garantiza la no organización ni relación personal duradera entre los trabajadores que permitan la sindicalización de los mismos en ejercicio de la lucha por las mejoras de las condiciones laborales; esta forma de contratación tiene una cosa particular y es la "independencia" que adquiere el obrero para poder hacer uso de su seguridad social, pues el factura de forma independiente estos servicios que muchas veces son dejados a un lado por la necesidad de completar el pago de deudas o poder darse un "lujo" como lo es la recreación.
Por otro lado uno de los mas grandes desmovilizadores frente a la posibilidad de contrarrestar las altas condiciones de informalidad y tercerización, se encuentra en el núcleo del clientelismo polÃtico regional a los que han sido convertidos las centrales obreras que en su gran mayorÃa son mero mecanismos para que la gran parte de sus afiliados no pueda perder su puesto laboral y ser remplazados por el ejercito de reserva; a esto sumamos una falta de aspiración y acción frente a las necesidades básicas del pueblo colombiano basado en la poca participación del movimiento social en el mismo y el desinterés generado a la frustración por parte de los trabajadores frente a la disolución de grandes movilizaciones nacionales por la perpetuación de intereses personales de sectores dirigentes de gremios, sindicatos y asociaciones; lo que nos conduce a una población trabajadora despolitizada mas interesada un Primero de Mayo por la UEFA Champions League que por salir a exigir sus derechos en su dÃa.
Este análisis no representa mas que una mÃnima introducción frente a los problemas mas superficiales de los trabajadores en Colombia, muchos se quedaran por fuera pero todos nos deben llegar a una sola conclusión la necesidad de que el movimiento polÃtico, social y urbano sea parte activa de las necesidades y exigencias del pueblo trabajador, y no se quede en un simple consignas que en muchos casos se encuentran lejos de los sentires reales y preocupaciones de los que dÃa a dÃa salen a rebuscar el pan.
Jorge RamÃrez
Colectivo Frente Patriótico.